Esta novela pertenece al genero literario del "landscape", un nuevo género que se ha puesto muy de moda y que consiste en historias de aventuras en lugares exóticos y remotos, muchas veces mezcladas con romance o acontecimientos de tipo histórico.
Este tipo de novelas por lo general son fáciles de leer, las protagonistas casi siempre son mujeres que se embarcan en una aventura, casi siempre en pos de un marido, y que al final acaban teniendo una experiencia muy contraria a la que esperaban, tanto en sus romances como en la vida que encuentran en su destino.
En este sentido esta novela tiene todos los ingredientes típicos de este género. Nos encontramos una protagonista desvalida y huerfana que acaba por casarse con un hombre mucho mayor que ella, en parte para escapar de un destino peor y en parte también se cree enamorada.
El destino del matrimonio es Surinam, donde el marido tiene una plantación. Alli nos sumergimos de lleno en la vida de la entonces colonia neerlandesa, con toda su crudeza y dramatismo. Nos encontramos con el drama de la esclavitud y también con el drama de las mujeres de la época que no tenian casi derechos, y sobre las que se ejercía otro tipo de esclavitud no declarada, ya que los maridos eran dueños y señores de sus vidas y propiedades.
El ritmo de la novela no está mal, es larga pero se lee bien, quizás hacia la mitad se haga un poco pesada, pero se deja leer, y hacia el final concentra casi toda la acción.
En general es un libro interesante y entretenido, que nos enseña también parte de la historia del periodo colonialista en Surinam. Y para quien no sepa donde esta Surinam, pues aqui os dejo el mapita.
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