Páginas: 346
Lo leí en: 9 días
¿Me gustó?: No
Argumento: Una periodista que viaja en un crucero cree haber sido testigo de un crimen.
Opinión y comentarios: Hace mucho que no leía tal despropósito de novela. Para empezar la protagonista se supone que ha ido al crucero con una finalidad y para hacer un trabajo, trabajo que en ningún momento cumple y sólo se dedica a drogarse, emborracharse y meterse donde no la llaman.
El argumento, infumable no, lo siguiente, no hay por donde cogerlo, una historia absurda, poco creíble, de cuento de tontos. Un millonario que se carga a su esposa enferma sin necesidad, no necesita el dinero y la esposa está en las últimas por su enfermedad, pretendiendo cambiarla por otra mujer que se le parece para sustituirla, como si eso fuera posible y no se fuera a dar cuenta nadie, y aún así si el proposito era asesinarla para heredar, ¿porque la sustituye por otra? Luego una complice idiota que cambia incomprensiblemente de chaqueta y se comporta de manera incongruente, la protagonista que denuncia algo que cree haber visto y oido pero que en definitiva no sabe nada y aún así la secuestran no se sabe con que fin. Y luego el final, absolutamente rocambolesco.
Bueno, para mi el crucero este definitivamente se ha ido a pique, pese a que el libro tiene en general buenas críticas, a mi no me convenció nada. Cuando leo una novela necesito creerme el argumento, aunque salgan elfos y enanos, y no ha sido el caso. Me estaba poniendo histérica todo lo que leía, sobre todo el comportamiento de los personajes, y si conseguí acabarla fue por no ser muy extensa y por ver como acababa la autora tanto desproposito, aunque, eso sí, al final me salté grandes párrafos.
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