Páginas: 595
Lo leí en: 14 días
¿Me gustó?: Sí
Argumento: Segundo libro de la saga dedicada a la familia Walsh. Después de una sobredosis que casi acaba con su vida, Rachel ingresa en un centro para curar su adicción a las drogas.
Opinión y comentarios: Esta autora ha sido un verdadero descubrimiento, me gusta como enfoca sus historias, de una manera divertida y muy fresca nos cuenta una historia que en el fondo es un auténtico drama.
En el primer libro trataba sobre la historia de una mujer abandonada, en este libro la protagonista es la eterna adolescente que no quiere madurar y que se refugia en el mundo de las drogas.
Desde luego la problemática que aborda es real y muy dramática en nuestra sociedad, la de los jóvenes que no hayan salida mas que en las drogas. Lo peor es que no son conscientes de que tienen un problema, el problema lo tienen los demás.
Eso le pasa a Rachel, sexo, alcohol, drogas, acaban siendo el centro de su vida, dejando al lado amigos, trabajo, familia..., y al final acaba en un centro donde ella se niega a aceptar porque está alli, mirando a los otros como si los demás fueran los drogadictos o los que están enfermos, pensando que ella es diferente, y que no debería estar allí.
Es interesante, en ese sentido, ver las diversas fases que va atravesando Rachel, desde el rechazo, hasta la aceptación y el arrepentimiento, sin faltar las recaídas y el remonte final.
La novela es muy interesante en todos los aspectos, y escrita en una forma totalmente adictiva. Me gustá mas la portada esa en la edición en inglés, muestra mejor la clase de viaje a la que Rachel va.
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