¡Debo decir que la lectura es la mejor diversión que existe! ¡Uno se cansa antes de cualquier cosa que de un buen libro! (Jane Austen. Orgullo y prejuicio)

miércoles, 19 de octubre de 2011

Fátima, la mora que me brindó su amor. Manuel del Río

Curioso libro que me encontré en un mercadillo de segunda mano, me llamó la atención y lo compré. No debió tener mucha tirada ni mucho éxito en su dia ya que he estado buscando alguna referencia y no encontré nada.
Dificil de catalogar, igual puede ser novela historica, costumbrista, libro de humor o erótico. Yo me lo he pasado bien leyendolo y me he reido bastante.
Lo catalogo como erótico pues así lo hace el comentario de la contratapa, aunque tampoco esta catalogación me parece cien por cien acertada. Tampoco se muy bien si esta novela es en parte o totalmente autobiógrafica pues tampoco está muy claro, aunque si parece que esté inspirada en vivencias del autor.
Lo peor, el que la redacción sea toda seguida, sin capítulos ni pausas en la lectura. Por otro lado tampoco me gustó las continuas interrupciones del protagonista que rememora continuamente hechos pasados haciendo perder el hilo de la situación relatada. La nombrada Fátima aparece solo en las cinco o seis páginal del final del libro, con lo cual tampoco el título me parece muy acertado.
Lo mejor los toques constantes de humor, el lenguaje florido y folclorico que emplea, lo bien ambientado que está en la época que relata, las coplillas y canciones que intercala y el transfondo histórico muy acertado y bien escrito desde la perspectiva del pueblo llano, la picaresca y los bajos fondos. Sin un argumento claro retrata una época y unas costumbres casi siempre relatadas con un humor hilarante.
La lectura lígera a pesar de la ausencia de pausas.

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